El consumo de agua durante las comidas en los pacientes con disfagia debería limitarse a un máximo de un 20-25% DE LAS NECESIDADES DE LÍQUIDOS DIARIOS. En las personas mayores debido a que se sacian precozmente, la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología recomienda no sobrepasar el 1,5 vasos de agua durante las comidas con el fin de evitar el llenado gástrico. En el paciente con disfagia cualquier líquido administrado deberá modificarse previamente su textura, sea mediante módulos espesantes o a través de aguas gelificadas. , listas para su consumo.

Sabías que…

  • Las bebidas FRÍAS y ÁCIDAS de textura modificada favorecen la deglución


No debe olvidarse que el APORTE DE AGUA PRESENTE EN LOS ALIMENTOS juega un papel fundamental en el aporte hídrico diario. 

 

La leche o productos lácteos líquidos, el consomé o caldo, las cremas de verduras y hortalizas de textura homogénea y suave sin hebras y filamentos, los batidos de frutas sin semillas colados y pasados por un pasa purés, son una fuente importante de agua.





Una buena recomendación dietética puede ser  administrar diariamente triturados a base de alimentos ricos en agua:

 

3 raciones frutas + 2 raciones de verduras y hortalizas + 3 raciones lácteos.

 

El consumo de bebidas alcohólicas, modificadas mediante un módulo de espesante,  no son útiles para una correcta  hidratación, por su efecto diurético. La Sociedad Española de Nutrición Comunitaria, en sus guías para una hidratación saludable, las recomienda consumir con moderación.

 

HidratsacionComidas_Ending1 (1)

Bibliografía recomendada:

  • Garmendia Merino G, Gómez Candela C. Diagnóstico e intervención nutricional en la disfagia orofaríngea. Ed. Glosa, 2010
  • Clavé Civit P, García Peris P. Guía de diagnóstico y tratamiento nutricional y rehabilitador de la disfagia orofaríngea. Ed. Glosa, 2011
  • Guía para una hidratación saludable. La Declaración de Zaragoza. SENC, 2008. Rev Esp Nutr Comunitaria 2009;15(1):225-230
  • Guia de Buena Práctica Clínica en Geriatría: Nutrición y Salud. Sociedad Española de Geriatría y Gerontología.

COMPARTIR